La investigación que dio origen a esta publicación se propuso una aproximación cualitativa a la comprensión de los contextos en los cuales el deterioro social pone en peligro la efectividad de las prácticas educativas. Para ello, se decidió hacer un trabajo exploratorio en diferentes escenarios sociales de la región, con la expectativa de que, en su diversidad, nos ofrezcan algunas claves para comprender y poder enfrentar los desafíos con que se encuentran hoy los sistemas educativos.
En esta publicación en particular se expone el trabajo realizado por Manuel Bello y Verónica Villarán en dos escenarios diferentes del Perú. El primero de ellos está en el distrito de Independencia de la ciudad de Lima, un barrio con elevados índices de pobreza y en el que vive gran cantidad de familias provenientes de ámbitos rurales. Allí se trabajó con escuelas de nivel medio, lo cual permitió indagar acerca de la situación que viven los adolescentes en ese contexto. El segundo escenario se encuentra en Quispicanchi, en el departamento de Cusco, y permitió una aproximación a los desafíos de la educación en una comunidad rural indígena.