Mensajes clave y recomendaciones del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo 2020, América Latina y el Caribe
Inclusión y educación: todos y todas sin excepción
Mensajes clave y recomendaciones del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo 2020, América Latina y el Caribe
Autoría
Global Education Monitoring Report Team
Editor
UNESCO
Año
2020
Idiomas
Español, Portugués, Inglés
Sobre la publicación

Los sistemas educativos deben reconocer, valorar y construir sobre la diversidad. La comprensión de la educación inclusiva debe apuntar a todas y todos los estudiantes independiente de su identidad, origen o capacidades diferentes. Para orientar los sistemas educativos hacia este fin, es central proporcionar financiamiento y apoyo específico a quienes más lo requieren, y compartir conocimientos y recursos entre docentes y otros actores de la comunidad escolar. El estado juega un rol fundamental como garante del derecho a la educación: debe otorgar una agenda común y transversal basada en las necesidades nacionales, establecer y monitorear un marco legal que institucionalice un sistema inclusivo, asegurar niveles adecuados de financiamiento, y promover la colaboración entre los diferentes actores públicos y de la sociedad civil para que desafíen los esquemas establecidos y ayuden a reducir las persistentes brechas educacionales.

Este informe regional ha permitido sintetizar experiencias a nivel local, nacional, regional y global para identificar desafíos y prácticas efectivas que consideren no solo los logros de aprendizaje, sino también los aspectos de equidad e inclusión del sistema educativo. Con este informe regional se busca aportar, con evidencia actualizada, a la construcción de políticas educativas orientadas por los principios de la justicia social. El objetivo principal es apoyar a todos y todas quienes trabajan en educación para garantizar que los niños, las niñas y los jóvenes de los países de América Latina y el Caribe puedan florecer y desarrollarse en sistemas que reconozcan el valor y la riqueza de la diversidad, para la construcción de sociedades más justas y sostenibles. Se trata de una búsqueda urgente, ya que la pandemia de la COVID-19 corre el riesgo de profundizar aún más las desigualdades existentes.